DEL DIRECTOR NACIONAL | Nos unimos a DSA para organizar

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En mis días de organizador sindical, aprendí algunos consejos sabios del legendario 1199 SEIU, que “el sindicato no es una tarifa por los servicios, es la experiencia colectiva de los trabajadores en lucha. No tenga miedo de pedirles a los trabajadores que creen su propio sindicato.”

Así es como operamos en DSA: nuestro poder proviene de nuestro trabajo, que solo pueden ser impulsados por ustedes, nuestros miembros. No somos un sindicato, pero estamos construyendo una institución arraigada y de largo plazo que los atrae y luego los impulsa a aprender a analizar el mundo, dirigir la organización y obtener victorias concretas. No solo nos capacitamos para hacer el trabajo, sino que también nos financiamos. Esto significa que debemos reclutar constantemente nuevos miembros, lo que aumenta nuestro poder. Y significa que no tenemos que orientar nuestro trabajo para complacer a un donante rico o una fundación.

Este es un modelo fundamentalmente diferente de la mayoría de las otras organizaciones. Significa que estamos construyendo nuestra propia confianza y habilidades colectivas en un mundo que le dice a la clase trabajadora que estamos solos e indefensos. También significa que estamos aplicando y aprendiendo colectivamente cuáles estrategias funcionan para generar poder, y que cuando surgen oportunidades o necesidades, tenemos la capacidad de movilizarnos.

Un ejemplo es en la política formal. Este noviembre, después de que todos los votos fueron contados, un asombroso 67% de nuestros candidatos e iniciativas habían ganado. Nuestra estrategia electoral depende de conversaciones en la puerta y por teléfono, y solo podemos enviar tantos voluntarios porque también nos organizamos entre elecciones. Desafortunadamente, la clase dominante se ha dado cuenta de esto y ya no la tomará por sorpresa. Después de su victoria venida de atrás en las primarias demócratas en Buffalo, nuestra miembra India Walton perdió la carrera de alcalde ante un demócrata neoliberal que se asoció con intereses ricos y el Partido Republicano, el mismo partido que está estableciendo nuevas leyes en todo el país para promulgar un gobierno minoritario permanente a su favor y que celebra la violencia justiciera. En este contexto, nuestra fuerte actuación electoral adquiere un nuevo significado. Estamos construyendo un banco profundo de funcionarios electos socialistas democráticos experimentados con una base sólida y organizada en sus comunidades. Esto es lo que se necesitará para proteger lo que queda de nuestra democracia.

Otro ejemplo de cómo nuestro trabajo organizativo nos da un pozo de fuerza desde el cual movilizarnos es en el ámbito económico. Se puede leer sobre nuestra solidaridad con la huelga de Nabisco en este número, pero las secciones de la DSA también están brindando o han brindado apoyo a los miembros en huelga de United Auto Workers (UAW) en John Deere y la Alianza Internacional de Empleados Teatrales y Escénicos (IATSE) en toda la industria del entretenimiento que realizaron una votación de huelga durante la negociación de su contrato. Cuando este número de Izquierda Democrática fue a la imprenta, supimos que los trabajadores de John Deere rechazaron un contrato de dos niveles, ganaron un aumento inmediato del 10% y obtuvieron otras ganancias importantes, mientras que en Houston, 14,000 Trabajadores Unidos de Alimentos y Comerciales en el Kroger, la cadena de tiendas de comestibles, votó por la huelga. Pero no solo estamos reaccionando a este tipo de desarrollos movilizándonos en el momento, estamos mirando hacia el futuro para pensar estratégicamente y organizarnos en preparación para cosas como el contrato de Teamsters con UPS, que expira en 2023. El hecho de que un equipo de reforma ganó las elecciones de Teamsters significa que podemos esperar una preparación escalando para la huelga junto con la campaña del sindicato para organizar Amazon.

Se acerca el invierno, pero con los camaradas podemos volver la pelea. Aquí hay una historia más esperanzadora sobre la próxima generación de organizadores socialistas. En noviembre, la sección de Jóvenes Socialistas Democráticos (YDSA) de la Universidad de Howard obtuvo una gran victoria en una campaña para mejorar las condiciones de aprendizaje y de vida en el campus. Una sección de la Universidad de Oakland en Michigan ayudó a elegir un concejal de la ciudad, y éste y las secciones de la Universidad de California en Berkeley, la Universidad de Nueva York, Alma College, la Universidad de Harvard y otros se han movilizado en solidaridad huelguista.

Mientras nos acercamos al 2022, el año del 40 aniversario de DSA, resolvamos ser corredores estratégicos de larga distancia para el socialismo.